No sé cómo o no recuerdo cuándo inicié la idea de hacerme un tatuaje. Fue hace algunos años, me parecen bonitos, claro los diseños elaborados o sencillos, simples, minimalistas y que no sean cosas como calaveras, armas o connoten algo negativo. Si son pequeños, lindos y bellos me encantan. De igual forma, me pueden gustar tattoos negros o con color, hay algunos coquetos, otros muy sexys y los de acuarela. Con respecto al lugar del tatuaje, me gustan los que están en el antebrazo, en el hombro o en las costillas y quizá en el pie, en cualquier otra parte del cuerpo no me agradan. ¡Ah! Olvidaba el lettering, también ese tipo de diseño me atrae. Así que hace tiempo pensaba hacerme un tatuaje de un trébol en la pompi derecha cerca de la cadera, pequeño y sólo en contorno. Ese era mi tatuaje imaginario que me haría algún día. Cuando veía a gente en la calle con tatuajes, curioseaba el diseño, algunos se ponen de color verde y así no me parecen estéticos, ese color lo adquieren...
" Es que es un buen bailador, no un buen bailarín" dijo el maestro en referencia al paso que hizo Alejandro. Y me quedé pensando en la definición de cada una de las palabras...pero de repente regresé a mi clase, porque teníamos que hacer ese paso que de acuerdo con el maestro es "un paso para hombres": el daka, daka, daka, daka. El paso al que me estoy refiriendo es el que usalmente vemos en el merengue o en cualquier fiesta donde los hombres se ponen "guapachosos" y mueven los hombros o el torso y generalmente (no sé por qué) ven hacia arriba. Y así dimos cuatro pasos básicos de jazz y al quinto hacíamos el daka, daka, daka, daka. La verdad no me gusta hacer eso paso, pero bueno fue ejercicio en la clase. Pero también vimos un poco de técnica, vimos el drag y otros dos pasos con la canción "Give it 2 me, los cuáles no puedo realizarlos del todo bien porque no coordino los pies y los brazos al mismo tiempo, pero el que sí me sale y me gusta es e...
El fin de semana fui de compras, me sirvió como terapia además creo que sí andaba de buen humor porque me gustaron varias blusas, playeras, bolsas, zapatos y un perfume. No soy muy adicta a los perfumes, sin embargo, hay unos a los que no me puedo resistir. El primer perfume que tuve fue a los 16 años, me regalaron una muestra del perfume Amarige de Givenchy, me gustó desde la primera vez que percibí su aroma, en ese entonces estaba en el CCH entonces, varios amigos me dijeron que olía bien. Así que para mi cumpleaños se lo pedí a mi papá de regalo (si se puede decir que era regalo). Mi papá me dio el de 100 ml., es un frasco grande (para mí) y la verdad no lo usé mucho, sólo como en 3 o 4 ocasiones y ya. Y ahí quedó el perfume, casi nuevo en su caja roja con vivos en varios colores y letras amarillas. Luego se me ocurrió comprar otro no recuerdo el nombre pero tampoco me gustó, era algo empalagoso, no dulce, no era floral, tal vez era algo más a maderas o qué sé yo...
Comentarios
Publicar un comentario